Gratas experiencias me quedaron de los talleres de cuento que desarrollé las semanas anteriores. A pesar que esperaba contar con más asistencia en el taller con adultos, ésta no fue tal. Sin embargo, los pocos que nos acompañaron fueron entusiastas y desarrollaron todas las actividades programadas. Me da gusto saber que algunas de las estrategias aprendidas en mi ejercicio de la escritura y la lectura se pueden transmitir de una forma sencilla a los demás. Hoy terminó el taller con los niños y jóvenes. Fue toda una experiencia porque se pudo crear una atmósfera de trabajo y colaboración muy agradable. Los niños, de distintas edades, desarrollaron nueve textos cada uno y comentaron que les pareció divertido. Terminamos con una lectura dramatizada. Además, se invitó a sus padres para que nos ayudaran al cierre del taller. Las señoras llevaron algunas botanas y la pasamos estupendamente. El próximo taller en el que trabajaré es el de “Estrategias de lectura y escritura para maestros de educación básica”. Lo que me da gusto es que a estos talleres se asista con el ánimo de aprender, por interés personal y no por el documento o por obligación. Creo que eso compensa el esfuerzo. Además, está la confianza que depositan en uno como tallerista. Eso es un gran aliciente. Así que seguiremos adelante por este camino. Más adelante voy a subir al blog algunos de los trabajos de los talleres. Espero sus comentarios.
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